Mate estilo neoclásico. Buenos Aires. Primeras décadas del siglo XIX.

Pieza de colección, lleva en su base las iniciales de su propietario: “L. V.” Por tradición oral, este mate perteneció al gobernador de las Islas Malvinas, Luis Vernet. Con bombilla, posterior. 

Medidas. Mate. Alto: 19,6 cm. Peso: 257 gr. Bombilla. Largo: 20 cm. Peso: 56 gr.

Con su cuenco tipo ovoide, presenta en su ecuador una guarda orlada, y en ambas mitades, bruñidas, la sobria decoración nos remite al estilo neoclásico con orlas bellamente cinceladas. Cuenta con un astil con nudo central, y una base tipo cáliz elongada, lisa, bruñida, con una guarda perlada en su tramo inferior que concluye en una baranda lisa donde fueron grabadas las iniciales de su dueño.

Luis Vernet (1791 - 1871), nacido en Hamburgo, se radicó en Buenos Aires en 1817 y dos años más tarde se casó con María Sáez, joven porteña. Aquí realizó una intensa actividad comercial, hasta que decidió canalizar sus energías en una empresa temeraria: cazar lobos marinos y ocuparse del ganado vacuno que por entonces poblaba la Isla Soledad, en el Archipiélago de Malvinas, cuya concesión le fue otorgada por el Gobierno de Buenos Aires con el compromiso de reparar los edificios de Puerto Soledad y entregarlos a disposición de las autoridades bonaerenses. En esa misión y diez años más tarde, en 1829, el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires lo designó comandante político y militar de la Isla, equivalente a gobernador, y acompañado por su familia y por colonos ingleses y franceses, regresó a Puerto Soledad donde enarboló la bandera nacional y mediante una proclama, transmitió a los pobladores la misión que le había sido asignada como autoridad máxima del territorio. De refinados gustos, Vernet celebraba las fiestas patrias, hasta que el 31 de agosto de 1831 arribó a Puerto Soledad la goleta norteamericana Harriet -la primera de tres embarcaciones que llegaron con el mismo propósito-, iniciándose un litigio que involucró a ambos gobiernos por el no cumplimiento de la reglamentación vigente para la caza de lobos marinos. En esos menesteres, Vernet se trasladó a Buenos Aires con su familia, sin imaginar que jamás regresaría a las islas, donde en su ausencia, la nave Lexington -también llegada desde Estados Unidos- tomó prisioneros a los representantes del gobernador… Aquel atropello norteamericano fue sucedido por el realizado por Inglaterra, que desde 1833 ocupa el territorio insular pese a todos los reclamos presentados por el Gobierno de Argentina.