Cerradura forjada, con su llave. Sudamérica. Siglo XVIII.

Hierro forjado, con su mecanismo en funcionamiento. 

Medidas: 15 x 16,2 x 4 cm. Llave. Largo: 15 cm.

La construcción de las cerraduras, llaves, candados y otros elementos destinados a la seguridad alcanzaron tal relevancia que existía un gremio solo para sus artífices, el de cerrajeros. Así sucedió en el Viejo Mundo, donde las Ordenanzas fijaban condiciones muy estrictas para sus miembros, desde la formación en adelante. Las obras salidas de sus talleres eran hechas sin encargo previo o las especiales, que respondían a las indicaciones dadas por los comitentes. Entre las primeras estaban las que tenían un sentido utilitario; las otras podían calificarse de obras únicas, especiales.

La presente, bella por su antigüedad y carácter, responde al primer criterio. Sin duda, tuvo su uso en una vivienda virreinal y lo notable, llegó hasta nuestros días en un buen estado.